10.19.2007

INTERVENCIÓN ARQUITECTÓNICA

Para el desarrollo de las intervenciones arquitectónicas, que nos permitan construir la ruta hemos destinado trabajar en la Zona Rústica como la primera etapa del proyecto ya que es ahí donde encontramos una mayor riqueza en cuanto a las actividades y los tipos humanos más autóctonos junto con una mayor decadencia económica y abandono por parte de las políticas territoriales y es precisamente esta el área que mas nos interesa abordar en sentido de entregarles una nueva alternativa de desarrollo y aplicar nuestra experiencia en el desarrollo de proyectos de orden territorial.
“Llevar arquitectura donde no la hay” fue la consigna de los profesores, para llevar a cabo la realización de los proyectos de titulo y nunca ahorrarle la inversión en un arquitecto a un mandante privado cosa que no se cumplió en la totalidad de los proyectos. El desarrollo de una ruta por la Cordillera de la Costa lo tomamos como un auto encargo y a la vez un desafío, ya que es una iniciativa pionera en Chile y siguiendo con el afán de llevar arquitectura donde no la hay que mejor que un territorio abandonado a su suerte, para lograrlo.
Dentro del diseño de la ruta como de las intervenciones fuimos nosotros mismos los conejillos de indias, para conocer las necesidades de un turista, la rigurosidad del territorio y comprobar el grado de interacción que se podía tener con los lugareños en pro de un beneficio reciproco.
La primera expedición fue parta trazar la ruta y en esa oportunidad decidimos ser autónomos y no relacionarnos con las personas, lo que en consecuencia fue un error ya que es ahí donde pudimos darnos cuenta que al no ser autónomos se requiere de los lugareños y ellos de nosotros, lo cual es la oportunidad que queremos otorgarles, es decir ser empresarios turísticos y es precisamente lo que hicimos en la segunda expedición, por lo tanto esta situación influyo fuertemente en el diseño, ya que lo que se necesitaba implementar no eran refugios, sino, marcas en el territorio, que dieran la posibilidad de guiar al turista y darles tan solo un descanso temporal, de ahí el nombre Landmark. La obra arquitectónica pasa a ser un hito en el paisaje el cual se emplaza en puntos estratégicos que llamamos puntos de inflexión en los cuales la ruta cambia, se cruza con otra, hay un nuevo orden territorial o simplemente puedo abandonarla por algún medio de transporte.
El hecho de que el turista se pueda relacionar con el lugareño hace que la obra sea un punto de descanso temporal que cumple una doble función, primero es guiar al visitante permitiéndole un descanso en la contemplación del paisaje y la obtención de información y segundo conforma un espacio público para los habitantes de estas zonas que carecen de lugares de encuentro apareciendo una vez más el rol social que pretendemos lograr.
El hito o Landmark se diseña primero a partir de un cubo como la forma pura de resumir la materia, este cubo es seccionado y se le extrae una parte la cual será la forma del hito, dentro de esta sección de cubo que ahora es una caja la cual debe contener el acto de ocupación y habitabilidad que poseerá por ser un objeto arquitectónico y no escultórico se le suma la forma del acto que mas bien es producir un choque entre la caja y el acto lo que me genera un vacío que se convertirá en el espacio habitable y que dará vida al Landmark.